Como fue

martes, noviembre 15, 2005

Vida tranquila últimamente

Es curioso la capacidad de adaptación de uno tiene. Estoy ahora en la oficina, en Gijón, sin demasiado trabajo e incluso con tiempo para pensar. En el último año, mi vida profesional se ha "tranquilizado" mucho respecto a lo que habían sido los últimos años. Llevo trabajando casi 8 años en la misma empresa con mucha estabilidad y viviendo de nuevo en Gijón los últimos 5 años. Sin embargo, mi trabajo de consultor ha hecho que siempre haya tenido que moverme mucho.

Vivo en Gijón, pero los proyectos que llevo son de toda España (principalmente Madrid y Barcelona, claro). Eso hizo tiempo atrás que me fuese a vivir a Madrid (recordadme que os cuente otro día algo de esa etapa ;)) y después, que aún habiendo regresado a Gijón, pasase muchos días fuera, de viaje, en clientes, etc. Viajaba más que el baúl de "la Piquer". Mi Iberia Plus se llenaba de puntos y conseguía viajes gratis para que disfrutase mi familia, sin embargo yo no podía disfrutar lo suficiente de ella (la familia).

Acabé hasta las pelotas de los aviones, los retrasos, el overbooking, etc. Tenía la agenda cerrada a muchas semanas vista, con multitud de viajes. Me pasó casi de todo volando, que me cayesen rayos en el avión, que diese la vuelta a mitad de camino, no poder volar, aterrizar en otro aeropuerto, de todo (de todo malo, nada bueno, claro :-P). Llegué un punto en que un viaje de 500kms para mí era como irme a tomar un café. Penoso.

A mí me encanta viajar, pero todo tiene un límite, y desde luego me encanta viajar por ocio, pero como todos sabéis los viajes "de negocios" no se parecen en nada. También recuerdo, no hace mucho, la sensación de estar en un aeropueto con vaqueros y camiseta. Sensación extraña, ya que siempre me tocaba ir de traje, claro.

El caso es que hace ahora un año más o menos, surgió un proyecto importante aquí en Asturias que he estado llevando y desde entonces, tachán! no he viajado casi nada por trabajo (sí por ocio, ya lo sabéis, pero así, sí me encanta). El proyecto se acaba ya. ¿Qué pasará el próximo año? El cliente ha quedado tan encantado, que tiene más proyectos en los que quiere que participemos. Yo, encantado. Ahora veo tan natural eso de despertarme toda la semana en mi casa, con mi chocolate al lado, que llevaría francamente mal el tener que volver a moverme tanto. Supongo que me acostumbraría de nuevo, pero el cambio sería traumático con total seguridad.

Disfrutaré de lo que hay mientras tanto llevando una vida profesional tranquila... aunque ya me conocéis, por otra parte soy un culo inquieto que no me gusta estar quieto 5 minutos, así que viajaré por ocio cuanto pueda ;)

jejeje, visto así hace gracia ;)